viernes, 30 de marzo de 2012

Ellas matan así...


Es el único crimen que cualquiera podría cometer, La emoción que nos vincula a la víctima  es el móvil. Creemos que al asesinar a tu pareja cercenamos la angustia de haber dejado de ser ese que construimos dentro de su cuerpo. Este es el éxodo de quienes se atrevieron a amar hasta dar muerte.

Por Elsy Reyes
Revista CONOZCA MAS  Noviembre 2010.


El amor se transforma en un deseo aniquilante de desahogar el profundo dolor de sentirse olvidado, engañado o vilmente maltratado. En un instante la fe se nubla y todo sentido del bien y el mal nos abandona. La sangre de ese ser tan común, tan presente en nuestra vida, escurre al advertir que hemos terminado con el suplicio y que ha comenzado un duelo que no sabemos traducir. Porque matamos lo que alguna vez fue nuestra razón de respirar.
Los crímenes de pasión parecieran predecibles, cometidos por celópatas, abusadores y esquizofrénicos que encontraron placer en privar de la vida a quien no pudo amarlos. Lo cierto es que todos poseemos ese potencial homicida. Muchos de los condenados eran gente socialmente funcional, aparentemente estable que sufrió un episodio de locura, cuya génesis común fue el desamor.
El asesinato pasional es aquel que se realiza con fines de castigo a otra persona con quien se tiene un lazo amoroso o sexual por motivos generados en la relación. Los más comunes son la infidelidad, los celos, el maltrato físico o el abuso sexual hacia el cónyuge o los hijos. Sea premeditado o no. Dada la emocionalidad que lo envuelve está retacado de aristas. Tanto legales como sociales y hasta humanistas. Porque -siempre y cuando no sea concebido como respuesta a un padecimiento psiquiátrico- son crímenes conceptualizados como un merecido ajuste de cuentas. Demasiado ortodoxo, pero por encima de todo, se convierte en un hecho de impacto cuando una mujer da la nota roja. Como géneros distintos, asesinamos atendiendo a nuestra naturaleza. Y la historia ha demostrado los efectos que puede generar un corazón femenino hecho trizas.

HOMICIDIOS CON FALDA 
El asesinato por pasión habitualmente tiene un rostro masculino. Como explica Myriam Jimeno en su libro Crimen pasional: contribución a una antropología de las emociones. "El que éstos [homicidas] sean mayoritariamente hombres señala que esta acción tiene que ver con las jerarquías de género en particular con la construcción identitaria de masculinidad y feminidad". En nuestra concepción histórica de sexos, la imagen de una mujer con las manos ensangrentadas pareciera casi antinatural. De acuerdo con la doctora en psicología social Luciana Ramos Lira, "según la evidencia epidemiológica, los hombres ejercen más violencia hacia nosotras. Las mujeres tienen más riesgo de ser asesinadas por parejas o ex parejas. De hecho, las mujeres matan principalmente a familiares, a sus hijos, mientras que la mayoría de los hombres no lo hace con familiares, pero cuando sucede es a sus parejas".
Innegablemente el concepto provoca el levante de la bandera feminista. Las sociedades latinoamericanas estamos demasiado acostumbradas a observar con desfachatez una golpiza propinada de marido a mujer y con la misma venda nos cubrimos para afirmar que se trató de un crimen pasional cuando un fallecimiento fue el saldo. Es así que los especialistas en toda rama relacionada tienden a incluir el femicidio. La tendencia indica que el crimen pasional a manos de mujeres suele elaborarse como respuesta al trato que muchas reciben de sus parejas. Pero al tiempo, esa propensión impide detectar que cada vez son más aquellas que dan muerte por puro y llano amor no correspondido o intereses monetarios.
La doctora en psicología Elvia Moreno Rosales dice que "hoy día no sabemos cómo podemos reaccionar ante un acontecimiento que nos perturba. Cada vez solemos sentirnos más descontroladas debido a las cargas de estrés y las emociones de abandono y autoabandono". En el caso de las relaciones de pareja es aún más impredecible porque cada vez tenemos menos seguridad de que alguien es leal o, como malamente se comprende, 'nos pertenece'.
Ante el aumento de homicidios (pasionales o no) realizados por mujeres es imposible no aludir a una nueva configuración mental, donde también nos planteamos como justicieras. Estadísticas de criminología en Latinoamérica reportadas por el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Colombia muestran que por cada cinco hombres homicidas pasionales hay una mujer. La cifra hace menos de diez años equivalía a una por 12. Si retomamos la tan mencionada violencia intrafamiliar como detonante debemos también abrir la referencia sobre qué tanto colaboramos nosotras. Estamos descubriendo que nos sentimos en un mundo hostil no sólo hacia nuestro género, comprendido como machismo, sino en otra vertiente que nos toca emocionalmente: la capacidad de ser amadas. El modo más primario de responder a esa violencia implícita (o clara) es con violencia, la cual sentimos cada vez más accesible, más parte de nosotras. '¿Cuándo se había visto que una mujer le levantara la mano a su marido?', dirían las abuelas. Hoy es un hecho no de igualdad, sino de impacto sobre la figura familiar. Las lesiones y asesinatos entre cónyuges cada vez son menos exclusivos de los hombres.

RADIOGRAFÍA DE UNA ASESINA 
Las reacciones humanas pueden avisar en ocasiones, en otras nos acuchillan sin esperarlo. Nos preguntamos si existirá un perfil determinado. De acuerdo con Peña Sánchez, "sería aventurado generar un perfil, puesto que más que un asesino pasional se trata de un hecho individual o colectivo en que el crimen es ejercido como una forma de poder y control". La necesidad de inmediatez que vivimos nos demanda una guía para detectar todo riesgo, no se diga sobre quién meteremos a nuestra cama o casa. Para algunos hombres las mujeres nos hemos vuelto ilegibles porque cada vez nos planteamos más fuera del molde que toda ciencia social nos atribuyó. Estamos situadas quizás en el lapso histórico en que todavía no nos ponemos de acuerdo en quiénes somos ni tampoco en quiénes queremos ser. Y no será hasta que clarifiquemos el nuevo concepto de fémina que se halle la concordancia porque aún somos un género subdividido y en contrasentido. Pareciera irreal que a unas cuadras de una mujer que se concibe independiente e ilimitada, vive otra que aún se autoconsidera propiedad del hombre que la eligió. ¿Quiénes, aún en esa disparidad de condiciones, son las que se atreverían a matar a su hombre?
La Dra. Ramos Lira agrega que "un estudio de mujeres homicidas de su pareja mostró que las circunstancias bajo las que ellas cometieron el delito eran":      

a) Presentaban antecedentes de maltrato conyugal.
b)  Como factores desencadenantes comunes previos al momento de cometer el delito, habían sido golpeadas e insultadas por sus compañeros frente a sus amigos o personas desconocidas.
c) Ninguna negó haberlo hecho. En otro orden de ideas, la psiquiatra Adriana Montes de Oca Saucedo, especialista en violencia intrafamiliar, analiza que "no podemos generalizar que toda mujer que asesina a su compañero lo hace motivada por el maltrato. Por supuesto que existe quien un día se descubre engañada y es capaz de masacrar". El que sea menos común y por lo tanto menos estudiado en nuestro país nos impide relacionar que la idea de muerte prevalece en mayor medida en las mujeres. De acuerdo con datos sobre el suicidio, las mujeres son más propensas al suicidio, la depresión y a pensar que vale más la pena morir que vivir. "Trasladar el pensamiento de la propia muerte y llevarlo hacia quien se considera el causante de ese deseo es un pequeño paso empujado por las emociones" dice Montes de Oca. Lo anterior lleva a determinar que, pese a que no existe como tal el perfil de una mujer proclive a derramar la sangre de quien ama, sí existen señales de alarma. Sobre todo en las mujeres más jóvenes dada la soledad cada vez más visible en todo estrato social.






AMAR A MATAR
La ficción ha ensalzado a las mujeres que asesinan en el mismo orden en que una invasión alienígena o el exterminio de nuestra raza se exponen. El cliché morboso de la 'tarántula', la femme fatale con un revólver apuntando a su amante o la sociópata que se venga del sexo masculino a través de sus víctimas, nos muestra su anormalidad. Pero dados los cambios y revoluciones mentales, los fenómenos sociales y la crisis de género, ¿estaremos ante el inicio de una era de mayor violencia, donde las mujeres son más 'activas' en la construcción de crímenes? Lo que nos faltaba, la evolución del amor lastimado.
Allá afuera hay quienes meditan, estudian hasta dónde eres capaz de llegar y elucubran. Un día, cuando ratifican el engaño o el poco valor que les das, llevan a cabo el plan. Otras, en una combinación de angustia, sorpresa, ira, desilusión, estrés prolongado y en ocasiones un estado alterado se convierten en homicidas. Imposibles de precaver. Bien enunció el escritor alemán F. Heumer, "el amor tiene un poderoso hermano: el odio. Procura no ofender al primero, porque el otro puede matarte". Cuando una relación saca lo peor de  nosotros, la pasión nos sobrepasa al grado de convertirnos en peligro, no podemos intuir que merecemos amar o ser amados de ese modo. "El amor es encontrar la paz en el corazón del otro..." No en sus entrañas ensangrentadas y expuestas.


Volví en mí cuando un policía me tomó del brazo y me obligó a levantarme. Estaba llena de sangre y me asusté, creí que estaba herida. Luego me percaté de que Joaquín seguía en el piso. Era él quien sangraba y no se movía, a pesar de que empecé a llamarlo a gritos. Cuando al día siguiente me confirmaron que había muerto, simplemente me rehusé a creerlo; durante tres meses estuve esperando su llamada. Nos habíamos hecho novios dos años atrás cuando estudiábamos en la universidad. Al principio todo era color de rosa, pero pronto nuestra relación se convirtió en algo destructivo. Él me celaba mucho, trataba de controlar todo lo que hacía y me espiaba. Yo lo terminaba, pero luego me dejaba convencer ante sus promesas de cambio y volvíamos a lo mismo. Empezamos a tener peleas muy fuertes; él comenzó a tomar con frecuencia y yo a tener crisis a veces histéricas y en ocasiones depresivas. Por insistencia de mi mamá acudí a terapia. Eso me ayudó a tomar la decisión de romper definitivamente. Una semana después de hablar con él, me llamó para decirme que estaba en un hotel y se iba a suicídar por mi causa. No se me ocurrió pedir ayuda, simplemente corrí a verlo. Cuando llegué al cuarto lo encontré muy borracho. Empezamos a discutir, sacó un cuchillo que se colocó en la garganta amenazando con que se lo iba a clavar, pero a continuación se abalanzó sobre mí y nos enredamos en una lucha cuerpo a cuerpo de la que no recuerdo nada hasta que llegó aquel carabinero. En verdad, no tengo idea de haberme apoderado del cuchillo para luego clavárselo en el corazón y hundírselo varias veces en el pecho y el vientre. A veces pienso que todo esto es una pesadilla de la que no puedo despertar. Me siento triste y lo extraño mucho porque lo amaba. Me siento enojada y lo culpo porque por su causa acabamos así. 
POR MARICRUZ PINEDA SÁNCHEZ

Rebeca fue liberada recientemente luego de pasar cuatro años en prisión. Su defensa adujo un ataque de locura temporal derivada del estado de tensión emocional en que se encontraba. En la actualidad está bajo tratamiento psiquiátrico y trata de rehacer su vida.

Nota: los nombres de todos los testimonios fueron cambiados por petición de los entrevistados.


POR EL PURO GUSTO
Asesina Hilda 
Dio muerte a tres de sus amantes entre la década de los sententa y 1986 en México. El primero cuando apenas tenía 16 años, al negarse éste a fugarse con ella. Lo envenenó en la alcantarilla en la que ambos vivían con otros niños. Más tarde aniquiló con su propia navaja al padre de su hijo sin razón aparente. Luego ordenó la muerte de su 'hombre' a dos lava autos, quienes la delataron al ser detenidos. Una vez en el proceso confesó otro par de 'detallitos' Contó: "Ya no me caía bien, aunque nunca me hizo nada"

TRAICIONADA POR LESBOS 
Asesina Alicia Meza
Peruana, folclorista quien mandara a asesinar a su amante, la también conocida cantante Alicia Delgado. La relación se llenó de golpes y amenazas por parte de la homicida, quien suponiéndose engañada enjulio de 2009 contrató a un tal Mamanchu-ra, para apuñalar a su novia una noche que volvía de una presentación. Fue trasladada al Penal de Mujeres de Chorrillos, Ex Santa Mónica. Continúa en proceso judicial y de esclarecimiento. Fue un sonado crimen del mundo del espectáculo andino.

QUIEN TE MANDA HACERME ENOJAR 
Asesina Ingrid Van Bergen
Actriz alemana que el 27 de julio de 1977 fue condenada a siete años de cárcel por matar a tiros a su pareja Klaus Knath durante una discusión. "Estaba irritada y me sacó de control", declaró al ser detenida. Desde entonces, jura, no ha vuelto a tener relación alguna. "No quiero que pueda pasar lo mismo de nuevo", afirmó a los medios europeos. De 77 años es considerada la nueva estrella del Freak al ganar este año el reality show Soy una estrella, una mezcla de nuestros Fear Factor, La Academia y otros.

TRES VECES TE ENGAÑÉ... 
Asesina Marta
Santiaguina descubierta por su suegra en tres ocasiones en relaciones extramaritales. Al amenazarla con delatarla con su hijo recibió una sigilosa visita nocturna de su nuera, quien dejó las llaves del gas abiertas para evitar que despertara y fuera con el chisme. Las huellas digitales en la estufa la delataron. Considerado crimen por pasión. Tras 18 años de condena fue liberada en 2002.

EL DESAYUNO
Asesina Perla
Química colombiana que encontrara en 1978 en el auto de su concubino unos calzones que no le pertenecían mientras él dormía. Tras meses de suponer infidelidades, con calma se dirigió a la cocina y preparó un delicioso almuerzo de huevos con unas pizcas de cianuro de potasio. Al ver las convulsiones de su amado, se arrepintió y lo llevó al hospital donde fue detenida. Tras una semana en coma éste murió. Fue condenada a 22 años de prisión.


MANOS DE TIJERA 
Asesina Alia B.
Letona que al cruzarse por las calles de Madrid el 29 de septiembre de 2009 con su ex amante y su nueva novia, una mujer rusa de nombre Calina los atacara con unas tijeras. Ella murió a causa de un corte en el abdomen. Él, un peruano de 41 años, sobrevivió a las múltiples heridas que le realizó en la cabeza. La globalización a la orden del crimen pasional. Se encuentra en proceso.

PORQUE YA NOS LA DEBEMOS
Asesina Dolores
En Cochabamba, Solivia tras una infancia dolorosa, varios intentos de suicidio y un matrimonio de infidelidades mutuas, decidió, junto con su amante y hermanos, darle fin a su esposo golpeador. Abel, su amante, le disparó, pero lo dejó con el suficiente aliento para que el hermano de Dolores, Eduardo, lo acuchillara y persiguiera. Ante su resistencia, ella le dio el último golpe con un martillo dejándole un boquete de diez centímetros en el cráneo. Se encuentra cumpliendo una pena de 27 años y seis meses.

PORQUE MI MENTE LO DECIDIÓ 
Asesina Clara, 'La Fantasiosa'
Mujer argentina que sospechaba de todas las que se le acercaban a su marido. Pero no sólo era desconfiada, era presa del delirio. Ni su marido ni su psiquiatra la tomaban en serio. Mientras tanto, ella se obsesionó con una supuesta rival y decidió encarnarla en su vecina a quien bautizó como Zulema. En su locura le pedía los documentos una y mil veces para rectificar su identidad. Una mañana de 1986 convencida de que era ella, la acuchilló más de cien veces en el ascensor. Tras un juicio rápido, fue declarada inimputable al saber dijo: "Mire qué cosa. Yo estoy presa porque la otra hija de puta no quería mostrarme los documentos. ¿A usted le parece justo?"


EMPANADITAS 
Asesina Emilia Basil
En 1973, mató a su amante al estrangularlo con un cordel de nylon. Lo cortó en pedazos e hizo de él empanadas porque amenazaba con contarle todo al marido. Fue detenida al ser encontrado en la basura el tórax de su amante, mismo que no pudo meter al molino de carne. La fiscalía pidió dieciséis años de cárcel; sin embargo, su abogado logró la nulidad del fallo. La condenaron a diez años de prisión por homicidio simple. Cumplió sólo seis y fue puesta en libertad alegando defensa propia.

POR MI HIJA 
Asesina Maricela
Una vida de vejaciones a manos de un esposo drogadicto y celópata que la maltrataba, violaba a su hija y amenazaba con matarlas a ambas, la convirtieron en homicida. En plena vía pública de Quito, Ecuador le disparó en el estómago y la cara. Veintisiete años y seis meses de prisión. "No lo hice por dinero, lo hice por mi hija".


SE ME NUBLO LA RAZON
Asesina Sonia
Desde chica aprendí a manejar armas. Mi papá perteneció a un grupo de judiciales que básicamente mataban por encargo, así que mi hermano y yo jugábamos a perseguirnos con pistolas descargadas por toda la casa y hacíamos rompecabezas con fotografías forenses. Mi mamá siempre estaba golpeada, cuando no, deprimida o drogada por la tristeza y humillación de ver que mi padre llevaba a mujeres a la casa y la sacaba de su cama para estar con ellas.
Así crecí, en una casa llena de violencia, miedo y falta de respeto; pensando que los hombres eran pura mierda. Las imágenes de él burlándose de mi madre, mandándola a que sirviera a sus amantes y pateándola para correrla de la pieza todavía me hacen llorar y llenarme de rabia Por eso me gustaron las mujeres, porque pensaba que ellas no podrían hacerme tanto daño. Anduve con algunas, pero tuve muchos problemas, hasta que encontré a Luz María, una mujer aparentemente dulce y dócil de la que me enamoré. Empezamos una relación más o menos estable. Pusimos un negocio de comida y arrendamos un departamentito. Ahí la llevábamos. Ella venía de un sector más acomodado y tenía algunos estudios, pero su inclinación homosexual había llenado de vergüenza a su familia y le habían dado la espalda.
Vivimos así varios meses. Podríamos decir que éramos una pareja normal y yo estaba a gusto porque ella era buena y cariñosa. Creo que por eso me ofusqué tanto un día en que discutimos y se me enfrentó y me gritó por una estupidez, luego me aventó un plato en la cabeza. La imagen de mi padre se colocó enfrente de ella y me confundí. Sin decir palabra fui al escritorio y saqué una pistola que tenía guardada. Todo el odio que acumulé durante esos años de mi infancia y adolescencia lo desquité en ese momento en que se me nubló la vista y la razón. Le vacié todos los tiros. Luego me senté a esperar a que llegara la policía. Me sentía tranquila, había dolor por haber matado a la mujer que amaba, pero por fin había logrado la revancha. 
POR MARICRUZ PINEDA SÁNCHEZ

Sonia fue condenada a más de 30 años de prisión por asesinato con todas sus agravantes. Ya han pasado 15 y debido a su buen comportamiento es probable que pueda salir en 2011. En la actualidad, espera su absolución.


Cuando los hombres matan, es por primera reacción, vencidos por la furia. En el momento las muelen a golpes hasta estallarlas o con ¡o que tengan a la mano les dan. Muchos compañeros de otros penales cuentan que casi todos se arrepienten, que hasta foto de la occisa ponen en su celda. La vuelven una santita. Admiten que se dejaron turbar o que su propósito sólo era meterles un susto. Los que sí iban con todas las intenciones lo dicen abiertamente. En cambio, las mujeres planean, pocas se dejan llevar por el impulso. Porque no es algo que deciden en un momento. Les van llenando el vaso gotita a gotita. La mayoría o era golpeada, le ponían los cuernos o le violaban a una hija; o todas las anteriores. Para el día que llevan a cabo el homicidio ya llevaban meses o años, primero deseándole la muerte, rogándosela al cielo. Una incluso me contó, que antes de matar a su esposo le hizo hasta una novenita a San Expedito para que se lo llevara. Como no le cumplió, ella tomó cartas en el asunto. Luego, la idea les empieza a acariciar la cabeza. ¿Qué tan difícil puede ser?, piensan. Comienzan a calcular las entradas y las salidas del hombre, cómo hacerle para que no parezca asesinato. Las que tienen dinero se buscan quien se manche las manos por ellas o las que tienen amante lo convencen para que éste lo ejecute. Y dado que se tomaron su tiempo suele ser más cruel. En mi experiencia en muchos años, sólo unas cuantas tomaron la decisión de la nada y lo acribillaron. Hubo una que al llegar a su casa lo encontró acostado con la sirvienta. Otra, una señora de dinero, siguió a su marido y cuando lo vio salir de su 'casa chica' con la amante y todo, les tiró el auto encima y mató a los dos. ¿A quién agarran antes? Adivina. A ellos, porque lo hacen con lujo de violencia. Con las mujeres se tardan más. Como que no les cabe en la cabeza a los ministerios que la viuda sea la homicida. Por lo regular se delatan cuando se apuran en cobrar los seguros y las indemnizaciones. O cuando se sabe que tenían un amante, las engañaban o eran maltratadas. Creo que si las mujeres asesinan menos a sus parejas es por una razón simple: ¿quién les va a mantener a los hijos si lo matan?





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lunes, 26 de marzo de 2012

Revelaciones del Vía Crucis


El canon evangélico, es decir el aceptado por la Iglesia católica, se enfrenta con creencias de profundo arraigo popular surgidas desde los evangelios apócrifos. El caso del Vía crucis, el camino que siguió Jesús hasta su muerte y sepultura, es una expresión viva de esta confrontación. 

Por Rafael Muñoz Saldaña

 

La forma más común de llamarlo es una frase latina que significa, en español, "el Camino de la Cruz", pero también se le conoce de otras maneras, como Vía Dolorosa y Estaciones de la Cruz. Con ese nombre se identifica lo que hoy podríamos considerar una 'novela gráfica' en la que se representan los pasos más importantes de la Pasión de Cristo como imágenes seriadas. El medio comun para hacerlo ha sido la pintura, pero también se han esculpido en distintos materiales. Su uso se generalizó a finales del siglo XVII y a partir de entonces se extendió a todos los templos católicos.
El objetivo de estas representaciones ha sido invitar a los fieles a realizar dos peregrinajes: el primero es un recorrido por los lugares por los que caminó Jesús en sus ultimas horas¡ el segundo, un viaje espiritual por las emociones que experimentó en esos momentos. La historia de esta devoción comenzó con los viajeros real es que desde épocas remotas visitaron Jerusalén, costumbre que ya existía en 380, En los siglos posteriores se ofrecían indulgencias (perdón de los pecados) a quienes lo hicieran, A finales del siglo XV el peregrino inglés Willlam Wey hablaba de 'estaciones' para referirse al recorrido. Durante la misma época, en diversas capillas europeas se elaboraron representaciones de los sitios de la Pasión. Originalmente se colocaban separadas entre sí por los mismos pasos que distanciaban las escenas enlos lugares reales.



Las catorce estaciones
No se sabe en qué momento se definieron el número y la selección de escenas que dieron origen al Vía Crucis de 14 estaciones. El reporte de Wey refiere la misma cifra, pero sólo cinco coinciden con el listado posterior y siete mencionan lugares conectados sólo remotamente con la P a sión. En diferente s libros y tratados el número osciló (19, 25, 37...). Por fin, en 1584 el libro Jerusalén tal como floreció en tiempos de Jesús, del autor neerlandés Christianus Adrichomius (quien compiló los datos para elaborar un interés ante plano de la ciudad de Jerusalén en tiempos de Jesús), menciona 12 que se corresponden con igual número y posición en la lista tradicional de las 14. Su libro circuló en diversas ciudades de Europa y es probable que haya servido como base para la selección posterior. Por épocas la devoción se vivía sólo con las represen-tacione s, pues en la ciudad de Jerusalén, dominada en temporadas por culturas de otra religión, llegó a prohibir se cualquier homenaje en tal es puntos.
Las diferencias en los contenidos de los listados medievales hacen pensar que no se derivaron de la ciudad, sino de distintos manuales religiosos. Hay variantes en el énfasis, la secuencia y el punto de partí da. Durante los siglos XVII y XVIII se elaboraron numerosas representaciones en las iglesias, Los pioneros fueron los frailes franciscanos, a quienes el papa Inocencio XI concedió el permiso de hacerlo en 1686, garantizando que quienes siguieran el VIA CRUCIS en las iglesias merecerían las mismas indulgencias que los visitantes de Tierra Santa. Correspondió finalmente al papa Clemente XII, en 1751, fijar el número y contenido de las 14 estaciones prevalecientes por 250 años.



EL debate con los Apócrifos
El cambio radical del Vía Crucis ocurrió durante el papado de Juan Pablo II [1978-2005). La preocupación de su pontificado fue detener la desbandada de los católicos hacia otras denominaciones cristianas. Una de sus estrategias fue regresar al canon evangélico (Mateo, Marcos, Lucas y Juan) y depurar el catolicismo déla 'contaminación' de los evangelios apócrifos, que tanto interés publico despertaron en la segunda mitad del siglo XX con productos como la polemica novela El código Da Vinci.
En el Via Crucis tradicional había distintos elementos procedentes de los Apócrifos que, simplemente, no están en el Nuevo Testamento. El Viernes Santo de 1991 Juan Pablo II dió a conocer su nueva versión durante la liturgia que, como tradición, preside el Papa en el Coliseo de Roma, La llamó "Camino Escritural de la Cruz". Atendía así la recomendación del Segundo Concilio Vaticano en el sentido de que todas las expresiones de oración deben basarse en las Escrituras.
Los estudios preparatorios para esa decisión hallaron que sólo ocho de las 14 estaciones contaban con una base escritural. Las números 3, 4, 6, 7, 9 y 13 no se mencionan en los evangelios. Algunas fuentes sostienen que en la versión de Juan Pablo II hay 15 estaciones y que la última de ellas es la Resurrección. No hay, sin embargo, ni en los textos oficiales del Vaticano ni en las reflexiones litúrgicas de los últimos veinte años nada que lo compruebe. De cualquier manera incluirla sería una contradicción, pues la Resurrección de Jesús no es un episodio de dolor y sufrimiento ni para él ni para los creyentes, sino el hecho jubiloso que pone en evidencia su triunfo sobre la muerte y otorga validez a todas las promesas que hizo durante su apostolado.



Compañeros de viaje
¿Con cuál versión del Vía Crucis quedarnos? El propio Juan Pablo II y su sucesor Benedicto XVI alternaron ambas en la celebración de Semana Santa, aun después de establecer la nueva, en un interesante diálogo con los Apócrifos. La versión clásica se usó en 1993,1998, 2000, 2001, 2003, 2005, 2006 y 2010, el 'Camino escritura! en 1991,1994,1995, 1997, 2002, 2004, 2007, 2008 y 2009 (véase la página oficial del Vaticano referida a las conmemoraciones del Vía CRUCIS realizadas por ambos pontífices en el periodo 1991-2010). La peculiar forma en que se definieron sus estaciones y la reforma papal lleva a pensar que el Vía crucJs y sus escenas valen sobre todo como medios para acercarnos a la jornada fundamental de una de las religiones mas importantes del mundo (en razón de su número de adherentes).
En el caso de los creyentes, el Vía crucis invita a una reflexión sobre el sentido del cristianismo, y a hacer de la reverencia frente a sus estaciones 'actos de reparación', acciones de desagravio contra el suplicio de Cristo, injusto desde cualquier perspectiva. Detalles más, detalles menos, esa es la intención de las estaciones canónicas y apócrifas. La lectura juiciosa que complementa ambas fuentes alecciona, enriquece, ilustra y nos aleja de antiguos fanatismos.
Aparte de las numerosas representaciones populares de la Pasión, basadas en el Vía crucístradicional,y del uso metafórico de expresiones usuales como Vivo un víacrticjs' para referirse aun sufrimiento Improbo, Benedicto XVI extiende el sentido a un retí ato de la condición humana: "Desdelas cámaras de gas de Auschwitz; desde las aldeas arrasadas con niños torturados en Vietnam; desde los suburbios llenos de miseria de la India, de África, de Latinoamérica... desde todas partes, nos mira e se rostro lleno de sangre y heridas, cubierto de dolor y de burlas".
El camino que siguió Jesucristo (se crea o no en él como profeta, nadie pone en duda su calidad moral y sufrimiento humano) es, de esa manera, semejante a la ruta personal y colectiva por la que hoy transitan millones de personas afligidas por procesos históricos y sociales, y también por la angustia y las penas individuales. El Vía crucís es una singular forma de 'turismo negro' (viajes que tienen por destino sitios de padecimiento) pero también un recorrido luminoso, un periplo real y espiritual a la vez, que reconoce el dolor del mundo pero en compensación ofrece a los fiel es la compañía divina y la residencia perenne en el Paraíso.

 

 

 

 

 

 

 

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domingo, 25 de marzo de 2012

Care Santos: La autora de "Hacia la luz"


"Tras vivir una ECM la muerte deja de ser una amenaza"

Para documentar su novela Hacia la luz (Espasa) la escritora Care Santos se entrevistó con una treintena de personas que habían protagonizado experiencias cercanas a la muerte (ECM). Recientemente ha publicado Bel, amor más allá de la muerte (Ediciones SM), una obra en la cjue también aborda la temática de la Innombrable. En la entrevista da a conocer algunos de esos inquietantes testimonios.

por Anika Lillo

 

Care Santos nació el 8 de abril de 1970 en Ma-taró (Barcelona). Estudió Derecho, pero desde muy joven trabajó como periodista, primero en el hoy desaparecido Diarí de Barcelona y más tarde en varios medios nacionales y algunos extranjeros. Desde hace años ejerce como crítica literaria en El Cultural, suplemento del diario El Mímelo. En 1992 fundó la Asociación de Jóvenes Escritores y ha impartido talleres literarios. Como escritora ha ganado numerosos premios. Su última novela para público adulto, Hacia la luz (Espasa), está basada en las vivencias de personas que han tenido experiencias cercanas a la muerte (ECM). -Cuando se entrevistó con personas que han tenido ECM, ¿cuál era su estado de ánimo al hablar de sus experiencias y qué le transmitieron? -Lógicamente, no era homogéneo. Había gente muy abierta a quien no le importaba hablar del tema, incluso pormenorizar, y otros que no deseaban hacerlo en absoluto. Desde que empecé a realizar las entrevistas como parte de la documentación previa a la escritura de la novela, pensé que debía ser respetuosa al máximo con sus necesidades y sus peticiones. Siempre intento serlo con las personas que entrevisto antes de comenzar a escribir, pero en este caso manejad material sensible y traté de ser muy consciente cu- ello. Claro que también encontré a personas que tenían grandes deseos de contar su experiencia. -¿Les quedó después miedo a la muerte? -En eso todos coincidían: su percepción de la muerte había cambiado. Tras vivir una ECM la muerte ya no constituye una amenaza, sino una meta placentera a la que no tiene sentido temer. Muchos de ellos se habían hecho incluso creyentes después de la experiencia.

LA MUERTE BUSCA SU MOMENTO
-¿Es cierto que la mayoría, en ese estado, no quería volver?
-Encontré de todo, incluso una mujer que discutió con el ser de luz que encontró al final del túnel porque ella deseaba volver con todas sus fuerzas para atender a sus hijos pequeños y él no lo creía conveniente. Finalmente, regresó -según me dijo- tras pactar con ese ser poderoso, tras lle-garauntrato,
-¿En qué lugares se producen? ¿Suelen ocurrir en los quirófanos, a raíz de accidentes, en la cama...?
-La muerte nos puede sorprender en cualquier parte, obviamente. También las ECM. Entrevisté a más de 30 personas: había quienes habían sufrírido accidentes de trafico; quienes habían tenido complicaciones en un quirófano o quienes habían contraído un virus rarísimo que les había conducido al coma en cuestión de horas. Abundaban las experiencias en los hospitales, pero también había casos de personas que las habían experimentado sin salir de su cuarto, en su propia cama. 
-¿Entre sus entrevistados hubo quien tuvo, además, una experiencia fuera del cuerpo (extracorpórea) y llegó a comentarlo después con testigos que en ese momento lo daban por muerto?
-La escena inicial de la novela se basa en la experiencia de una de mis entrevistadas. Entró en coma por una alergia a la anestesia. Le habían practicado una cesárea para que naciera su hija y durante ¡a ECM conoció a un niño que dijo ser un hermano suyo que había muerto antes de que ella naciera. Nunca nadie le había hablado de ese hermano. Cuando regresó, se lo preguntó a su madre y entonces supo que era cierto: sus padres habían tenido otro hijo y había muerto antes de que ella viera la luz... Aquello me impresionó tanto que decidí abrir la historia con este caso, realmente impactante.
-¿Son siempre familiares los que les esperan al Otro Lado? Tengo entendido que a veces ven a la Virgen, a Dios... ¿Los ven o los sienten? 
-Según los testimonios que he recogido, es más común encontrar una presencia digamos divina que a sus familiares. Muchos de mis entrevistados coincidían en decir que al final del túnel -algunos al comienzo- encontraban un ser de luz. Algunos veían directamente a Jesucristo o a Mahoma. Otros no podían precisar su identidad, pero sabían que era un ser superior que estaba allí para guiarles y conducirles.
Sin embargo, entre los no creyentes es más común la presencia de personas conocidas por ellos: el marido muerto años atrás, el padre... pero a menudo estas visitas se reciben durante la agonía y no durante el coma o la ECM. Me pareció que hablaban de una especie de zona intermedia, una línea de sombra entre la frontera de la vida y la muerte en la que es posible encontrarse con los seres queiidos que nos precedieron en el Más Allá. Pereonalmente, es una idea que me agrada mucho más que la del ser de luz o la de Mahoma dándome la bienvenida. Pero, claro, yo soy atea.

 

LA ZONA DE SOMBRA
-¿En alguna ocasión antes de la ECM alguno de ellos había protagonizado alguna experiencia paranormal o que no tuviera explicación científica?
-Los sueños también foiman parte de esta zona de sombra entre el mundo de los vivos y los muertos. De hecho, hay muvisitamos y aconsejarnos (o amenazarnos, aunque apenas encontré experiencias negativas).
Éntreoste a varias personas que habían soñado con personas muertas antes de saber que habían muerto. Y también a algunas que a través de los sueños habían resuelto cuentas pendientes con sus seres queridos fallecidos. -¿En qué creen o creían? -Así como en la presencia del ser de luz sí era importante tener en cuenta las creencias de cada cual, en lo que respecta a los sueños no había paralelismos. Tanto creyentes como no creyentes habían tenido este tipo de experiencias. 
-Se especula que cuando "ven" pasar su vida como en una película retrospectiva están supuestamente siendo sometidos al Juicio Final, en el que ellos mismos valoran el comportamiento que han tenido a lo largo de su existencia. ¿Les quedaba el recuerdo de lo que habían hecho bien o mal?
-Solo una persona me habló de eso y recuerdo que me llamó la atención, porque es uno de los tópicos que se repiten con más frecuencia. Dijo que había visto su vida resumida en unas pocas escenas y que le había quedado muy claro qué era impelíante y qué no.
-Cuando hablan de la vuelta a su cuerpo, ¿qué explican?
-Me impresionó mucho el caso de una chica de 18 años que no deseaba morir y que para regresar decidió pensar en el chico del que estaba enamorada. Pensó en todo lo que tenía pendiente con él, en lo que aún no habían hecho. Regresó después de tres paros cardiacos.
-¿Sabe si se les da la opción de regresar o quedarse?
-Tuve noticia de varios casos en los que se les había invitado a quedarse y ellos decidieron regresar.

 

CEREBRO ENGAÑOSO
-Y en el momento de volver a la vida, ¿qué sienten?
-Pesadumbre, cansancio, dolor... Muchos hablan del peso del cuerpo físico, de lo terriblé que resulta después de haber conocido el otro estado, el gaseoso o el gelatinoso (a decir de algunos). Pero también me dijeron que había sido una sensación momentánea, que muy pronto se alegraron de estar aquí y de haber madurado tanto en tan poco tiempo. 
-¿Dónde cree usted que han estado estas personas?
-¡Menuda pregunta! Tal vez te decepcione saber que mi mente cartesiana no tiene una respuesta. Entre todas mis lecturas también estuvieron las más científicas, las que hablan de las sustancias químicas que genera el cerebro para que sintamos bienestar cuando nos estamos muriendo o qué pasa en nuestras comeas para que se contraigan de modo que veamos la luz al final del túnel y el túnel mismo, o qué mecanismos cercanos al delirio nos llevan a tener visiones o a escuchar voces... De algún modo nuestro cerebro nos engaña para anidarnos a que el final sea más dulce. Eso es lo que dicen algunos neurólogos. Otros afirman que la ciencia se refugia en ese tipo de argumentos para no tener que admitir que hay fenómenos inexplicables. Yo me alimento de las dudas. Y cuando escribo prefiero generar preguntas en lugar de respuestas.
-¿Hubo algún niño entre sus entrevistados? 
-Hubo un joven que sufrió una ECM con ocho años. Estuvo tres meses en coma y despertó al escuchar una canción que le cantaban sus compañeros de clase. Fue uno de los testimonios más emocionantes.
-Care, ¿a partir de haber experimentado una ECM alguno de sus entrevistados dice creer ahora en la reencamación? 
-Ninguno la nombró, aunque yo no mostré interés por ese aspecto. Los libros de Raymond Moody enlos que se habla de la reencarnación no son sus primeros trabajos, que eran los que me interesaban. Moody es una figura muy controvertida. Poste-rioiTnente se airepintió de lo que había dicho sobre las ECM y le echó la culpa a sus editores. Creo que no es criticable que no le tomemos muy en serio en esa etapa. Sus experimentos con cámaras negras y lucecitas no me inteivsan. Sí, en cambio, su estudio sobre las ECM, su primer trabajo antes de que se hiciera famoso y los editores lo tentaran con sumas astronómicas. 
-Tras escuchar todas estas experiencias, ¿se puede creer más en el alma y la reencarnación?
-Depende de cada cual. Yo estoy igual que estaba, solo que con más dudas. Y con más conocimientos sobre las personas, que me interesan más que cualquier otra cosa.
-Según lo que usted ha visto, ¿cómo se toma la comunidad médica este tema? 
-Hay posturas que van desde el rechazo más frontal al comencimiento más absoluto, pasando, claro está, por un prudente escepticismo. En nuestro país no es común encontrar neurólogos que crean que el estudio de las ECM es científico. Fuera, en Estados Unidos o Reino Unido, ya es otra cosa. Pero incluso allí estos científicos, como Sam Parnia, al igual que le sucedió en su día a Elisabeth Kübler-Ross, siempre tienen que enfrentarse a un grupo de detractores que no tienen en consideración su trabajo. Me temo que estamos a años luz de que las cosas cambien en ese sentido. 
-Hace tiempo escuché testimonios de hombres a los que les aterrorizaba morir porque sus ECM mostraban demonios y un infierno en vez de la apacible luz. ¿Ha sabido de algo de esto?
 -Ninguno de mis entrevistados me ha contado experiencias negativas y me consta -por la bibliografía que he consultado- que no son en absoluto comunes. Pero no soy una especialista, claro, solo una lectora muy curiosa y muy aplicada a quien el asunto le interesaba lo suficiente como para escribir sobre él. 

                    

LOS PIONEROS EN EL ESTUDIO DE LAS ECM
Inquietudes tras el gran telón

Los pioneros en la investigación del fenómeno de las ECM son:
• Raymond A. Moody: Doctor en Filosofía y médico psiquiatra. En 1975 publicó Vida después de la vida, una obra basada en los testimonios de sus pacientes que habían tenido experiencias de ECM. Su obra se convirtió en un auténtico best seller mundial.
• Elisabeth Kübler-Ross: Doctora en Medicina y Psiquiatría. Con libros como La muerte: un amanecer, se convirtió en unas de las profesionales más admiradas y respetadas en el estudio de la muerte y el proceso de morir. Su trato directo con moribundos le proveyó de cientos de testimonios directos de ECM.
• Kenneth Ring: En 1977 fundó la Internacional Association for Near Death Studies (IANDS) (Asociación Internacional para el Estudio de las Experiencias Cercanas a la Muerte).
• Antonio Vila: Este doctor del Hospital Virgen Macarena de Sevilla fue uno de los profesionales médicos más destacados en el estudio
de las ECM en España. Lamentablemente, Vila falleció en 2007 sin llegar a hacer públicas las conclusiones de sus más de 25 años de estudio.
• Sam Parnia: Cardiólogo británico miembro de la IANDS. En 2002 realizó un estudio sobre esta materia con 63 pacientes del Hospital de Southampton. Asimismo, publicó la obra ¿Qué pasa cuando morimos? y ha logrado establecer un protocolo de trabajo para que 25 hospitales de Reino Unido y de Estados Unidos encuesten a personas reanimadas tras una muerte clínica con el fin de averiguar si han experimentado una ECM.

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Enigmas & Casos Paranormales. 
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