miércoles, 1 de abril de 2009

Los nuevos Góticos

Desde hace siglos, el gusto por lo oscuro, por todo aquello que el hombre teme y desconoce, ha ido creciendo en adeptos. Fue un subgénero de la novela de terror el estilo literario que elevó a la categoría de arte el mundo de las tinieblas. Una generación de jóvenes inconformistas recuperó su esencia más tarde, en la segunda mitad del siglo XX, y dio forma al llamado "movimiento gótico", que acabó brillando con luz propia...



El movimiento gótico o gothic es demasiado ecléctico y ha tenido muchas derivaciones -dark, siniestro...- para ser definido con exactitud y al gusto de todos. Para muchos forma una sub-cultura; para algunos consiste en un movimiento social con tintes de alejamiento más que de denuncia; para los que se auto-denominan "góticos auténticos", consiste en toda una filosofía de vida. En cualquier caso, el movimiento actualmente es una mezcla de diversas corrientes y estilos que lo convierten en difícil de delimitar.
Hoy por hoy se asocia normalmente a la escena musical, el campo cultural donde ha estado y está más presente, pero el movimiento se adentra mucho más atrás en la historia. La palabra gothic se usó por primera vez para designar despectivamente a los pueblos bárbaros del norte de Europa. Durante los oscuros tiempos medievales, el término se utilizó para dar nombre a una forma de arte entonces desprestigiada que se caracterizó por su belleza, pero también por su aspecto siniestro. El estilo estaba rodeado de un aura de misterio desde sus mismísimos cimientos. La catedral gótica fue erigida por los maestros del medievo como un enclave energético orientado hacia las estrellas. Fueron un ejercicio de recreación del Cielo en la Tierra, un intento de alcanzar lo inalcanzable. Sus enormes vidrieras y espacios diáfanos, mezclados con una fantástica combinación de luces y sombras, daban un énfasis de ambigüedad y misterio a dichos edificios en una época de grandes temores y espiritualidad enfermiza. Esa sensación fue recuperada por el movimiento gótico -tanto por el actual como por los escritores de la novela gótica del XVIII y XIX- y catedrales como las de Chartres o Reims se han convertido en centro de peregrinaje obligado para el auténtico amante del goth.


Esta forma de arte, mayoritariamente arquitectónico, pretendía reflejar la dicotomía entre el bien y el mal. Un enfrentamiento que recupera la esencia del movimiento cultural en los últimos treinta años: la muerte como parte inseparable de la vida, como culminación y máximo equilibrio vital -o mortal, podríamos decir-. De ahí esa pasión por lo sobrenatural, por el viaje sin regreso, por la muerte como el pilar de la existencia vital. No hay luz sin oscuridad ni vida sin muerte.
La Edad Media se caracterizó por su brutalidad y una constante preocupación por el más allá y el temor a lo desconocido -vampiros, fantasmas, hombres lobo, temor que estuvo vigente durante siglos, sobre todo en el centro y el norte de Europa.
Siglos más tarde llegaría el Romanticismo, que se enfrentaba al racionalismo positivista del siglo XVIII, que había acabado con antiguos mitos y supersticiones y con el libre albodrío de los sentimientos para centrarse únicamente en el potencial de la razón.


El eclécticismo de la música goth

En la actualidad el género gótico ha difuminado sus líneas creando multitud de estilos y corrientes musicales difíciles de delimitar: Industrial, GothRock. Boom, Electro Dark, Lote Metal...


En España están creciendo en popularidad grupos herederos de Bauhaus, Joy División o The Cure como los madrileños Stereoskope, que han publicado su segundo trabajo, Main, los gallegos Traje de Saliva o los vallisoletanos Jennifer in Látex. Otros grupos que merece la pena citar son Silesia. Los Humillados, Uparadis, Byoxide y Spectral. Dentro del estilo que podríamos catalogar de Opera-GothMetal destaca un grupo de gran calidad cuya popularidad en todo el mundo va cada día en aumento. Los suizos Lacrimosa, liderados por Tilo Worffy Anne Nurmi han conseguido que huestes goth de toda Europa llenen las salas donde realizan sus conciertos. Las canciones versan acerca de la visión de Wolff sobre la vida y de sentimientos encontrados como el amor, la tristeza y la muerte -temas ya de por sí claves en el mundo gótico-. Lacrimosa st ha convertido en un grupo metálico muy polémico. Fn la canción BerKeLer-"ü hereje"- Tilo ca tífica al Papa de "Señor de las Moscas" y "Satán", llegando a manifestar que "confortas a los pobres / pobres porque tú les robaste el dinero / pobres porque creyeron en ti / Oh, Papa, lo has llevado demasiado lejos / lloro por tu alma...". La polémica está servida, eso sí, rociada de una gran calidad compositiva, todo hay que decirlo. Larga vida al metal gótico.



Tim Burton y las tinieblas

Si hay un director de cine actual que se caracteriza por rendir homenaje a la estética gótica clásica heredera de las obras literarias del género y del cine expresionista, es sin duda alguna el norteamericano Tim Burton. Entre sus films de corte gótico -ambiente decadente, oscuridad, misterio, hechos sobrenaturales. ..-destaca Eduardo Manostijeras, un oscuro relato romántico cuyo protagonista-interpretado por un joven Johnny Depp- más parece una réplica de Robert Smith que de un
personaje romántico al uso. Bitelchus es otro de ios títulos de Burton, marcado por las sombras en la fotografía y una historia delirante cuyos personajes bien podrían protagonizar alguna canción de The Cure -fíjense en la adolescente interpretada por Winona Ryder-.



Las dos primeras entregas de Batman. dirigidas por Burton, son también un ejercicio de ambientación gótica, reflejada de manera especialmente evidente en la ciudad de Gotham -su nombre lo dice todo- donde se desarrolla la acción. Otra de las cintas claramente oscuras del extravagante realizador es Sleepy Holló», el relato del famoso "jinete sin cabeza" cuya atmósfera envolvente rodeada de misterio -árboles retorcidos, cadáveres, bosques recónditos- recuerda a las películas clásicas del expresionismo alemán como El Gabinete del Boctor Caligari. El film más claramente definí-torio del gótico de Burton es Pesadilla antes de Maridad, un ejercicio de originalidad dentro del cine de animación que no fue dirigido por Burton, sino por Henry Selick, pero que surgió de su virtuosa imaginación.


La novela gótica

Como precursora del movimiento romántico surgió un tipo de novela que se caracterizaba por una atmósfera opresiva, elementos de un terror incipiente y una clara pasión por lo sobrenatural. La ambientación de los relatos góticos destacaba por describir paisajes sombríos, edificios medievales, misteriosos castillos, lúgubres catacumbas y bosques impenetrables. Este tipo de novela sobresalía, además de por su atmósfera envolvente, por la presencia de lo sobrenatural, lo fantástico, aquello que no podía ser explicado por la razón humana -vemos de nuevo la crítica al Racionalismo del XVIII-. Destaca también la fusión de la realidad con los sueños hasta llevar al protagonista a un "extrañamiento" donde no es capaz de diferenciar lo real de lo ficticio, todo ello aderezado por el poder de la naturaleza, que en este tipo de obras se convierte en enemiga del hombre: truenos, enormes tormentas, niebla espesa... La presencia del mal es algo palpable a lo largo de todo el relato, mientras que los protagonistas se erigen en antihéroes martirizados generalmente por su existencia -algo que sufrieron realmente muchos de sus autores, verdaderos personajes reales atormentados como Polidori o Jan Potocki-.


En un ambiente cargado de sombras y seres malditos surgió el movimiento literario gótico, entre cuyos autores destacó con luz propia Mary Shelley, la "madre" de Frankenstein.

En Inglaterra la novela gótica nació con la publicación en 1765 de El Castillo de Otranto, del conde de Oxford Horace Walpole. La novela es un compendio algo desordenado de hechos sobrenaturales que, aún a pesar de su pésima calidad, influyó de manera decisiva en la literatura de corte fantástico dando forma a todo un subgénero literario dentro del terror: la literatura gótica. El escrito cuenta la historia de Manfredo, un ser despreciable que pretende arrebatarle la prometida a su hijo. El autor decidió publicar la obra en un primer momento como una traducción de la apócrifa historia del italiano Onuphrio Muralto, pero visto el éxito cosechado por la novela, reconoció finalmente su autoría. El Castillo de Otranto influiría enormemente en la británica Mrs. Barbauld, que en 1773 publicó SirBentram, donde se cuenta la historia de un noble que, en un oscuro y tenebroso castillo, revivirá una noche a una mujer noble fallecida; y ésta ofrecerá un banquete a su "salvador"... La obra de Barbauld, quien años más tarde adoptaría el nombre de Mrs. Aikin, aunque incompleta, refleja la Influencia de Waípo/e en una amoientación opresiva cargada de oscuridad y elementos sobrenaturales -en este caso el más notable es la capacidad para resucitar a ios muertos-.
En 1785, Sophia Lee publicó The Recess, una obra donde se combina la novela histórica con el terror de corte gótico. Más tarde sería la escritora Ann Radcliffe quien revitalizaría el género gracias a su novela Los Misterios de Udolpho, donde se cuenta cómo la joven gala Emily es recluida en un castillo de los Apeninos.


En 1820 el clérigo Charles Robert Maturin escribe Melmoth el errabundo, donde de nuevo el protagonista decide vender su alma al maligno.
1796 fue el año de la publicación de otra novela mítica, El Monje, de Matthew Gregory Lewis. La obra relata los tormentos por los que tiene que pasar el protagonista, el religioso Ambrosio, que tras ser apresado por la Inquisición, vende su alma al diablo. En la misma línea de El Castillo de Otranto se publica en 1799 Sí. León, de William Godwin, autor así mismo de la no menos aterradora Caleb Williams.
Su hija, Mary, dio forma a una de las novelas clave de la historia de la literatura del XIX, Frankenstein o el moderno Prometeo, tras una reunión que mantuvieron la autora, su marido Percy Shelley, Jane Clairmont, Lord Byron y el doctor John William Polidori en la residencia de Villa Diodati, una lluviosa noche del 14 de junio de 1816. Para acabar con el aburrimiento comenzaron a charlar sobre literatura fantástica. Entonces decidieron apostar a ver quién era capaz de escribir la historia más terrorífica. La joven Mary Shelley sobresalió con creces por encima de los demás con su novela, obra fundamental también de la literatura gótica, que fue revisada y corregida por su marido, el poeta Percy.
De la imaginación del secretario y compañero de viaje de Byron, John William Polidori, surgió El Vampiro, precedente de las novelas de vampiris-mo cultivadas más tarde. El relato cuenta la historia del aristócrata Lord Ruthven, un personaje sofisticado, frío, misterioso, calculador y encantador con las damas, además de apasionado por la sangre. Con su protagonista Polidori creó el prototipo del vampiro, que sería recogido más tarde en innumerables obras. El autor, antes de poner fin a su vida en un episodio lleno de misterio, confesó haber construido el personaje de Ruthven inspirándose en su jefe, Lord Byron, de quien dijo que era "romántico, enigmático, frío, a la vez que elegante y apasionado". Las relaciones entre Polidori y Byron no terminaron demasiado bien. El primero decidió abandonar a su jefe y acabó suicidándose, según algunos, debido a que Byron reclamó la autoría de El Vampiro, y con el renombre y la fama del autor de Don Juan, Polidori fue acusado de plagio aún siendo realmente el verdadero autor. Lo cierto es que el ideal romántico se reflejó de una manera evidente no sólo en su obra, sino también en su propia vida, atormentada y malgastada como pocas.



Otro autor destacado del movimiento -y que acabó sus días también de forma trágica, neurasténico y deprimido-, fue el polaco Jan Potocki. Con una sólida formación intelectual de corte clásico, este erudito, arqueólogo, etnólogo e historiador, escribió La Historia del comendador de Toralva. El relato pertenece al famoso manuscrito encontrado en Zaragoza. La novela transcribe el trabajo hallado en la ciudad española por un oficial de las tropas napoleónicas, donde se narran las peripecias y viajes del caballero Alfonso Van Worden, aventuras que se mueven entre el campo de la cabalística y las historias de bandidos y aparecidos -de nuevo destaca lo sobrenatural-, Pero no sólo el relato puede ser tachado de fantástico; la misma historia de su publicación está llena de hechos inexplicables. Apareció en fragmentos a comienzos del siglo XIX, permaneciendo el ochenta por ciento de la obra escrita de forma manuscrita y desconocida, hasta que en 1989 se conoció el texto completo, gracias a Rene Raddrizani y a la editorial José Corti de París. El 2 de diciembre de 1815 Potocki se suicidó utilizando una bala de plata que pulió él mismo.
Otras obras tardías del género que cabe destacar fueron El tío Silas, de Joseph Sheridan Le Fanu, y la mítica Drácula (1897), de Bram Stoker, que recuperó la esencia del salvaje Vlad Tepes que en la Rumania del siglo XV empalaba a los turcos -hay quien opina que se basó en la condesa húngara Elisabeth Bathory, que a finales del siglo XVI acabó con la vida de más de 600 doncellas para bañarse en su sangre -ver ENIGMAS núm. 103-.
Más tarde el cuento de miedo inglés sería cultivado por Arthur Machen, autor de Eleusiana (1881) y El Terror, H. R Lovecraft o Edgar Alian Poe, para llegar en la actualidad hasta Anne Rice, la escritora gótica por excelencia, autora de la célebre Entrevista con el Vampiro, adaptada al cine por Neil Jordán, con Brad Pitt yTom Cruise como protagonistas.



Las nuevas generaciones oscuras

El inconformismo y la provocación del punk de los años 70 del pasado siglo -Sex Pistols, Peter&The Best Tube Babies, Cockney Reject...- fue heredado por una nueva generación británica a principios de la década de los 80 que poco a poco iría dando forma a lo que terminaría designándose como movimiento gótico -también Dark o Siniestro, dependiendo de una serie de particularidades y notables diferencias-. Grupos que marcan'an toda una época e influirían de manera decisiva en otros posteriores que comenzaron a crear himnos y a llenar salas de conciertos.
Fue el periodista inglés Anthony H. Wilson, de la cadena televisiva BBC, quien usó por primera vez el término goth para referirse a la vestimenta de algunos de éstos jóvenes ingleses. El club The Batcave -"La Cueva del Murciélago"- se convirtió en el lugar de reunión de estas bandas en un viejo sótano del Soho de Londres. Los grupos pioneros de entonces, que heredaron además del inconformismo del punk la visión nihilista de la vida del Glam y del New Romantic, fueron Joy División, Sisters Of Mercy y Bauhaus -creadora del tema musical que se convertiría en himno indiscutible del movimiento: 8e/a Lugosi's Deati -"La Muerte de Bela Lugosi"- entre otras. El vampiro se convirtió en el ente sobrenatural más admirado por los jóvenes góticos. Su aire de misterio, su palidez extrema y su ansia de sangre, unidas a la inmortalidad y el romanticismo encumbraron a éste como máximo exponente del sentimiento gótico. Fue quizá la misma admiración hacia la figura de Lugosi, maestro inolvidable del terror cinematográfico durante décadas y protagonista del mejor Drácu/a de la historia del cine, la que convirtió al "no muerto" en el eje fantástico idolatrado del movimiento, que for jaría definitivamente el mito con el tema musical de Bauhaus. Cuentan que Lugosi llegó a creerse el mismísimo conde en los últimos días de su vida, durmiendo incluso en un ataúd -algunos jóvenes goth afirman hacer lo mismo, lo que parece más bien mito que realidad-. Lo cierto es que más allá de una amor exacerbado hacia el personaje que le dio de comer y que acabaría ridiculizando en sus días de decadencia junto a Edward Wood, sus "manías" eran fruto de su gran adicción a la morfina, droga que acabó con sus días convirtiéndole prácticamente en un loco. Bela por fin descansó en su amada caja de madera, y lo hizo, como era de esperar, vestido de Drácula.
No sólo Inglaterra fue el único país donde el movimiento musical hizo mella. En Estados Unidos la música gótica adquirió el nombre de Deathrock, y triunfó en California gracias al magnífico grupo de Rozz Williams Christian Death.



Asesinos en la oscuridad

Aunque el movimiento en general nada tiene que ver con la política -por la demagogia superficial de ésta, entre otras cosas- y mucho menos con las tendencias de ultraderecha, se da el caso de que en Alemania los dirigentes de grupos y partidos políticos neonazis intentan captar a jóvenes de toda clase, y en concreto del movimiento goth. La tendencia al esoterismo y al ocultismo de corte satánico ofrecen una vía de fácil acceso para inculcar en éstos la ideología aria.
El 6 de julio de 2001 un caso que relacionaba el movimiento goth con el neonazismo estremeció a la opinión pública germana. Daniel y Manuela Ruda, una matrimonio gótico, asestó nada menos que 66 puñaladas a su compañero Frank Hackert. Grabaron en su piel un pentagrama ocultista y un bisturí fue encontrado incrustado en su estómago. Junto al cadáver, la policía halló una lista con 15 nombres. Según posteriores investigaciones, se descubrió que esos correspondían a las futuras posibles víctimas que la pareja pretendía asesinar tras acabar con Hackert. Pero el espectro de lo macabro no concluyó ahí. En el domicilio fueron descubiertos varios cuchillos manchados de sangre repartidos por la casa a modo de decoración ritualista. En el salón la policía encontró una colección de calaveras humanas y el baño estaba ornamentado con un póster de una mujer ahorcada. Además había un ataúd en el que Manuela, de 23 años, dormía en ciertas ocasiones.
El proceso judicial no fue menos escabroso. Durante el mismo salió a la luz la vinculación de la pareja con el movimiento neonazi. Además Manuela mostraba una gran repulsa hacia la luz del Sol. Había reemplazado dos de sus dientes por colmillos de animal para parecerse más a un vampiro, personaje sobrenatural que fascinaba a ésta y en general a todos los seguidores del gothic. Admitió además su vinculación con el satanismo. Afirmó haber entrado en contacto con dicha corriente ocultista en un club gótico londinense -no olvidemos que fue en dicha ciudad donde comenzó este fascinante movimiento-, asegurando haber conocido a vampiros auténticos, y donde bebieron sangre supuestamente de personas vivas. Pero el espectro del neonazismo era aún más grave que los devaneos con la oscuridad.
Un testigo del proceso, el joven Frank Lewa, declaró haber conocido a Daniel Ruda en un local de skin-heads de extrema derecha. Daniel había participado en las elecciones alemanas junto al Partido Nacional-Democrático de Alemania, el NPD, partido de ultra-derechista. Según Lewa, Ruda conoció a Manuela a través de un fanzine de black metal, corriente derivada del heavy caracterizada por las letras satánicas y elevada a la fama mundial primero por Venom y en la actualidad por grupos como Dimmu Borgir o los británicos Oradle ofFilth. Este movimiento protagonizó también una de las escenas más oscuras de la historia noruega reciente cuando VargVikernes, líder de los blackmetaleros Burzum acabó asestando 23 puñaladas a Euronymous, líder del grupo del mismo estilo Mayhem.



Daniel y Manuela fueron detenidos en la ciudad de Jena, al este de Alemania, tras haber visitado los pueblos de Sonderhaussen y Apold. En el primero de ellos -a modo de macabro recorrido turístico- el joven Hendrick Móbus -de 16 años- había asesinado junto a unos amigos a un compañero de clase. Una vez en prisión, el joven grabó un CD donde se incluía una canción titulada Zyklon B, el gas utilizado por los nazis en el campo de concentración de Auschwitz para asfixiar a los judíos. Daniel y Manuela pretendían acabar con la madre de la víctima de Móbus como una forma de homenajear a su ídolo. En el proceso, ella declaró que escuchó una voz que le decía "apuñálale en el corazón". Supuestamente era una orden de Satán desde el más allá.
Manuela Ruda fue sentenciada a pasar 13 años de internamiento psiquiátrico en una institución de máxima seguridad, y su marido Daniel a 15 años. Con este caso, el movimiento gótico alemán sufrió un fuerte revés, sobre todo por la vinculación de la pareja con la extrema derecha, lo que llevó a la prensa nacional a catalogar a los goth de nazis. Nada más alejado de la realidad; aunque un fuerte sector de góticos alemanes están relacionados con estas tendencias extremas, el movimiento en su gran parte nada tiene que ver con el nazismo.
Aunque la pasión por la muerte es uno de los pilares de la existencia goth, está claro que el movimiento no parece condenado a finalizar sus días en una caja de madera. Por el contrario, cada vez parece estar más vivo y cuenta con más seguidores a lo largo y ancho del planeta. ¿Serán las huestes de Satán que se están reorganizando? La noche más lúgubre nos lo dirá algún día... ?


aquí estoy, aqui estas...
mi corazon esta roto, no te das cuenta?
mirame a los ojos y dime lo que ves..
toma mi corazon y vete lejos..
mi alma llora,
mi vida apesta,y mi corazon esta herido
necesito un concejo...
dime que pasa con el mundo?
dime que hacer con mi soledad?
dime ya estoy muriendome y quiero saberlo..
los espiritus estan viniendo,
los estoy sintiendo,
apurate no tengas miedo
tu alma esta conmigo,
tu miedo tambien
lo puedo sentir ...
por fín te veo sufiendo,
no respires asi vamos muriendo
ooh dulce amor..
ooh amado mio..
estoy despertando,
me estoy perdiendo ..
ayudame a volver ya no estamos muriendo...


2 comentarios:

  1. mm bueno!!!.... anterior mente me decian q si era gothica y siempre lo negaba, cría q eso era erroneo no sabia ni q era eso, al leer barias notas sobre su contenido de lo q es gothic, pense que iba a tener pilares para desir que no lo soy pero al contrario mis pensamientos estan mas serca que nada. No se si apenarme o seguir siendo quien soy sin importar que sea.

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