El abad Tritemio

El abad Tritemio vivió a medio camino entre los siglos XV y XVI, en un tiempo en el que los eruditos daban una importancia capital a la magia. Misterioso personaje, fue el autor de una de las obras más extrañas de aquel tiempo, Esteganografía, un manual sobre criptografía que, para algunos, no sería sino otro más de los polvorientos libros malditos...

Óscar Herradón

Revista Enigmas Nº 182, Enero de 2011.

El pasado mes hablábamos en esta sección de Comelio Agrippa, al que algunas fuentes consideran discípulo del abad Tritemio. Pues bien, fuera o no fuese Tritemio el mentor del autor de Filosofía Oculta, el caso es que este mes se convierte, por derecho propio, en protagonista del "Panteón de Herejes", pues su manejo de las fuentes heterodoxas y mágicas lo convierten en otro de los más atractivos eruditos renacentistas.

Johannes Tritemius -o Tritemio-(1462-1516) nació en pleno Renacimiento. Reconocido erudito, estudió en Heildelberg (Alemania), donde al parecer fue instruido por un maestro en ciencias ocultas y esoterismo, quien le advirtió de que en el viaje de regreso a su hogar encontraría la clave de su vida. En dicha universidad fundó la conocida como "Cofradía Céltica", una sociedad secreta para el estudio de la cabala, la numerología, distintas lenguas y las matemáticas, a las que tanta importancia daña Agrippa. Ciertamente, su existencia cambió por completo el año 1482. En el camino de vuelta a su pueblo natal, Trittenheim (Alemania) -de ahí el nombre por el que pasó a la historia- comenzó a llover copiosamente y se refugió en la abadía benedictina de Sponheim. Aquél ambiente misterioso, lleno de recogimiento, ejerció una poderosa influencia sobre Johannes, que decidió tomar los hábitos y hacerse monje. Apenas un año después, en 1483, se convertía en abad del citado monasterio. Tenía tan solo 22 años.

Siempre preocupado por el saber, instruyó a sus hermanos en el arte de la decoración de libros. Bajo su responsabilidad, Sponheim se hizo célebre y muchos eran los príncipes y reyes que enviaban emisarios al lugar para pedir el consejo del abad, cuya erudición se había vuelto proverbial. Aunque el monasterio había contraído enormes deudas, nuestro protagonista consiguió solventarlas y compró multitud de extraños manuscritos antiguos, dando forma a una importante y misteriosa biblioteca. Coma el año 1505 cuando fue llamado por el conde palatino Felipe a Heildelberg, donde Trítemio cayó gravemente enfermo; mientras, en la abadía los benedictinos, cansados de su rigurosidad, provocaron una revuelta. Johannes ya no pudo regresar al que había sido su hogar durante años, y hubo de renunciar, con gran tristeza, a la maravillosa biblioteca que había reunido. En 1506 entró a formar parte de la abadía de San Jacobo, donde permanecería hasta su muerte.

 

 Un antiguo grabado que representa al abad Tritenio, uno de los pioneras en darte de la cartografía y al que muchos consideraban en su tiempo poco menos que un Bromante. Junto a estas líneas, una de las paginas del misterioso texto conocido como esteganografía, y que no ha sido descifrado hasta tiempos recientes gracias a los avances en el campo de la nformática.

 

Durante siglos Esteganografía permaneció sin descifrar, hasta que en tiempos recientes, gracias a la informática, se conoció su contenido

DE RELIGIOSO A NIGROMANTE

Aunque por encima de todo se consideraba un buen cristiano y todas sus "artes mágicas" estaban orientadas en este sentido, pronto la fama de hechicero le persiguió. Su producción literaria comenzó con un libro de sermones convertido en éxito editorial. Llegaron a atribuírsele más de 7.000 trabajos sobre teología, por lo que fue considerado el "padre de la bibliografía", sin embargo, cuando publicó un tratado de índole mágica sobre criptografía conocido como Esteganografía, en 1499, su nombre engrosó la lista de sospechosos de nigromancia, sin duda debido al poco cuidado que mostró a la hora de comunicar sus "descubrimientos sobrenaturales". El abad siempre intentó limpiar su buen nombre de dichas habladurías.

Esteganografía -o Steganographia- era un compendio de escritura secreta, criptográfica, lleno de extrañas imágenes y fórmulas mágicas que supuestamente servían para invocar a los espíritus de los ángeles. Tritemio dividió su escrito en tres libros utilizando la magia angélica de tipo cabalístico, además de la magia natural que pretendía buscar un equilibrio entre el hombre y el cosmos. Johannes señaló la forma de invocara los ángeles de las diferentes partes de la Tierra, los del tiempo y las horas y a los siete ángeles que ejercían su influencia sobre los siete planetas entonces conocidos: Oiffiel -que controlaba Saturno-, Zachariel -que lo hacía con Júpiter-, Michael -Sol-, Samael -Marte-, Amael -Venus-, Rafael -Mercurio- y Gabriel, que según el erudito influía sobre la Luna.

Dirigida a un reducido número de eruditos, iniciados que conocen'an la clave para descifrarla, durante siglos Esteganografía permaneció velada, como otros muchos textos de contenido mágico. Sin embargo, hace pocos años un criptógrafo consiguió descifrar la clave del manuscrito de Johannes utilizando un complejo sistema informático. El autor del hallazgo fue el norteamericano James A. Reeds, quien transcribió el libro original y después lo microfil-mó para hacerlo compatible con su ordenador. Reeds descubrió que Tritemio no había utilizado letras actuales pero sí, en cambio, otras inexistentes en la actualidad. Tras sustituir adecuadamente los signos, Reeds desentrañó los mensajes secretos ocultos en el entramado de signos y números de aquella enigmática obra. Aparentemente, el abad simplemente había insertado frases escogidas al azar, sin un cometido especifico, quizá para desviar la atención. Lo que está claro, según Reeds, es que Tritemio fue uno de los más grandes expertos en criptografía de la era anterior a la informática.

Puede que al final nada relevante se escondiera entre las páginas de Esteganografía, sin embargo, ciertos investigadores, como Jacques Bergier -quien siempre se decanta por las explicaciones sobrenaturales, poco acordes con la realidad- opinan que el abad ocultó en su libro las claves de un conocimiento prohibido de poderes indescriptibles, entre ellas, la forma de hipnotizar a personas a distancia, a través de ciertas manipulaciones del lenguaje. Aunque es poco probable. El libro fue publicado en 1606, impreso en Francfort. Sin embargo, durante más de un siglo circuló en forma manuscrita, influyendo supuestamente en magos y nigromantes.

Pudo ser durante aquellos años cuando parte del material se perdió o, quizás, el mismo autor decidió en el último momento que éste no debía ser conocido por los profanos. ¿Había descubierto la clave de un peligroso secreto? Probablemente nunca lo sabremos. Entre los más de cincuenta libros que se le atribuyen, destaca también Poligrafía, un estudio dedicado exclusivamente al arte criptográfico y sin las referencias mágicas de la anterior. Todavía hoy, tantos siglos después, la figura de Tritemio, injustamente olvidada, continúa siendo un enigma.