¿Operaciones de marketing, simples inocentadas... o hay algo más detrás de los círculos de las cosechas? En inglés se conoce como crop circles a los extraños dibujos, a veces extremadamente complejos, que, de la noche a la mañana, aparecen en los sembrados de cereales de medio mundo.
CROP CIRCLES:
Verdades y mentiras
FUENTE: Revista española MAS ALLA (edición 2009).
FUENTE: Revista española MAS ALLA (edición 2009).
Desde hace tres décadas los medios de comunicación de todo el mundo se han hecho eco de la aparición de extrañas marcas en campos de cereales (trigo, cebada y maíz). Sus grandes dimensiones, sus insólitas formas y, en general, algunas de sus características han desconcertado a las autoridades y los estudiosos de este complejo fenómeno, que casi siempre se produce en lugares poco accesibles. De la noche a la mañana y con total impunidad, en cualquier espacio al aire libre del planeta algo o alguien plasmaba dibujos, a veces tan complicados y enrevesados, que resultaba difícil pensar que el ser humano pudiera estar detrás, por lo que pronto surgieron toda suerte de hipótesis para explicar su origen. Durante años la extraterrestre fue la más socorrida, si bien no para todo el mundo. Muchos seguían pensando que el hombre era capaz de eso y de mucho más.
Nuevas explicaciones
Con el tiempo han surgido nuevas hipótesis. Algunos informes científicos han demostrado que, de manera puntual, algunos fenómenos atmosféricos, meteorológicos y geológicos pueden producir determinados dibujos en la superficie de los sembrados, aunque desde luego mucho menos elaborados que los que suelen hallarse. En estos casos su disposición es aleatoria, su simetría, nula y, en definitiva, no resultan tan complejos, lo cual no explica buena parte de los casos que se producen. Otra de las teorías que más fuerza ha cobrado es la hipótesis Gaia, según la cual nuestro planeta actúa como un ser vivo. Por medio de determinadas señales nos advierte de que no puede seguir soportando ni la presión ni el desgaste al que el hombre lo somete. Dejando a un lado las elucubraciones, lo cierto es que este verano se han producido varios casos en España. Unas señales que, con independencia de su origen, han generado desproporcionadas expectativas.
Sabías que...?
...una de las primeras referencias a los círculos de las cosechas se remonta al siglo XVII? Se trata de un grabado en el que se observa a una extraña figura realizando un círculo en un campo de cereales. La imagen, que se publicó en diferentes panfletos ingleses de la época, es una representación satírica del Diablo segando los campos de cultivo. Con ella querían reflejar un enfrentamiento entre terratenientes.
Coger y Chiorley: Los circlemakers británicos
Muchos de los dibujos que aparecen en los sembrados han sido creados por el ser humano, tal y como ocurrió en septiembre de 1991 en Reino Unido. Doug Coger y David Chiorley, de 67 y 62 años, respectivamente, fueron señalados por la prensa británica como los autores de un gran número de crop circles hallados en ese país. Al verse descubiertos, confesaron que habían utilizado una técnica sencilla para realizar los trazados: cuerdas y tablones que servían para improvisar rudimentarios compases. Ayudados de una brújula, usaban los tablones para aplastar las plantas orientándolas a su antojo.
Campaña publicitaria
Se llama Seven Tiki y es una bebida que procede de las Islas Fiji. Aún es desconocida en España, pero pronto será distribuida por una conocida empresa que se ha servido de la mitología para lanzar una impactante campaña de marketing.
¿Cómo? Plasmando el símbolo de la nueva bebida en sembrados de cereales de varias ciudades españolas. Esta singular idea proviene de las creencias de la propia cultura fiji. Para esta, cuando los dioses desean ponerse en contacto con las personas lo hacen mediante señales de gran tamaño. Así les hacen notar su gran poder y potencian el mensaje que quieren transmitir. España ha sido el primer país europeo donde han desembarcado estos círculos publicitarios, pero pronto llegarán a otros, como Italia o Bélgica. Por supuesto, la puesta en marcha de esta espectacular y brillante campaña publicitaria ha servido para que se hable nuevamente sobre el fenómeno de los círculos y ha animado a imitadores poco avezados a copiar esta clase de dibujos, lo que en algún caso ha provocado la intervención de la policía. Así ha ocurrido en Ronda (Málaga) a principios de este verano. MÁS ALLÁ ya informó de este asunto en el número pasado, aunque en ese momento aún se desconocían todos los detalles del caso. Según se desprende de los informes policiales a los que esta revista ha tenido acceso, no hay nada extraño o sobrenatural en los dibujos de Ronda. Dejando a un lado los círculos falsos o artificiales, esto es, los creados por la mano del hombre, es justo reconocer que existe algo enigmático en el fenómeno, ya que no todos pueden ser explicados de manera convincente.
Hablan los expertos
Nuestro colaborador Josep Guijarro es una de las personas que más sabe sobre este fenómeno en nuestro país. Entre los casos que ha investigado se encuentran los de los famosos círculos que aparecieron en Cataluña en la década de 1990.
“La oleada de círculos en las cosechas registrada en España este verano es una campaña de marketing de una firma comercial de bebidas alcohólicas para promover una marca de ron, explica a MÁS ALLÁ. Es la primera vez que en España se utilizan los campos como `lienzo´ publicitario, aunque existe el precedente de los círculos de Castellfollit del Boix (Barcelona), donde un artista local llevó a cabo una maniobra similar para atraer la atención sobre su obra. En este caso, los agricultores no tuvieron conocimiento del asunto y esto dificultó la tarea de los investigadores.” Guijarro es bastante crítico con los crop circles: “El estudio de John McNish ha dejado claro que la mayoría obedece a la intervención de jóvenes que, por las noches, provistos de tablas, cuerdas y planos, crean los diseños con una maestría increíble”. “Pese a todo –añade Guijarro–,los científicos que han estudiado el fenómeno aseguran que el ADN de los cereales de los cultivos donde aparecen los verdaderos círculos presenta peculiaridades y que los tallos de las plantas parecen haber sido `fritos´ por microondas, mientras que en el caso de los falsos círculos los tallos están medio rotos por la utilización de las tablas. Precisamente por esto los círculos que estudié en Els Omellons (Lleida) me parecieron muy significativos. La cebada de aquel campo no tenía más de 15 cm de alto y los análisis que efectué descartaron la acción de herbicidas o pesticidas. Por tanto, algo desconocido `coloreó´ la planta provocando una tonalidad de verde más intensa.” Se habla de círculos verdaderos y falsos. ¿Existen características que nos sirvan para determinar cuáles pertenecen a un grupo u otro? Josep Guijarro responde a esta cuestión. “En un reciente congreso celebrado en México, el investigador estadounidense Ruben Uriarte desgranó los resultados de sus estudios sobre los círculos. Él ha llegado a captar sonidos en su interior. Su longitud de onda dibuja una imagen fractal que se corresponde con el diseño de la superficie, por lo que –en lugar de pensar en extraterrestres, ovnis, etc.– atribuye los verdaderos círculos a anomalías terrestres, seguramente de origen electromagnético o geológico”, comenta Guijarro.
Es decir, existe la posibilidad de que, aunque muchas de estas “señales” no tengan origen humano, su explicación no obedezca a causas sobrenaturales o ajenas a nuestro planeta. En este sentido, Guijarro se muestra contundente: “No sé a qué se
deben los círculos, pero tengo claro que no son producidos por ovnis ni por enfermedades de las cosechas. Desde mi punto de vista, la Tierra sigue escondiendo sus secretos y esta es su particular forma de decirnos que algo no va bien”. Para Josep Guijarro, la teoría extraterrestre que muchos sostienen para tratar de explicar un fenómeno de características tan dispares ha quedado relegada a un segundo plano. Por eso se muestra más partidario de la hipótesis Gaia. Pero ¿qué dice la ciencia al respecto?
Círculos de brujas
Antonio Flores, catedrático de Botánica de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Málaga, piensa que “todo se debe a una intervención humana, no al crecimiento de las plantas. Las semillas germinan y cada una produce una planta o varios ejes verticales, pero por sí solas no es posible que originen figuras geométricas con esas formas. Solo lo sería en el caso de que hubiera existido algún tipo de manipulación –es posible que el suelo contenga algo que impida la germinación de la semilla–. En estos casos tendríamos un patrón discreto de zonas con plantas germinadas y no germinadas, lo que podría dar lugar a una figura geométrica. Pero para ello tendría que existir una intervención humana”. No obstante, según Antonio Flores, sí existen causas biológicas que podrían explicar algunos casos. “En otro grupo de organismos, como los hongos, pueden darse de forma natural figuras geométricas regulares, que son sumamente conocidas. En el Viejo Mundo, en Europa, la tradición oral está llena de referencias a los `círculos de brujas´. Una espora empieza a crecer bajo tierra. Si el terreno es homogéneo, se desarrollará con la misma potencia en todas las direcciones y llegará un momento en que estos organismos formen estructuras reproductoras, que son las que sobresalen de la tierra y que llamamos setas. Forman círculos de setas y todas equidistan del punto donde se encuentra la espora inicial. Esta manifestación regular nos hace sospechar. Los humanos siempre pensamos que la regularidad, lo que sigue un orden, contiene un mensaje, como si se hubiera producido una intervención sobrenatural. Algo negativo, casi siempre. Por eso se llamó a esta manifestación `corro de brujas´. Cuando el terreno no es homogéneo, no son circulares, sino más bien semicirculares. Estas formaciones solo reflejan las variaciones ecológicas del terreno”, indica Flores. Queda claro que, a pesar del carácter fraudulento o publicitario de muchos de estos círculos, el fenómeno sigue siendo un reto para la ciencia, que no puede explicar los casos en los que no se ha podido constatar la intervención humana. Algunos de ellos siguen siendo un enigma. Por el momento, solo queda seguir estudiando estas extrañas y elaboradas formaciones que aparecen de vez en cuando en los sembrados de cereales de todo el mundo.
Señales... ...cinematográficas
La popularidad de los crop circles llegó a su máximo apogeo con el estreno de la película Señales (2002). El filme, escrito, producido y dirigido por M. Night Shyamalan y protagonizado por Mel Gibson, mostraba el desconcierto de un granjero que veía cómo en sus sembrados surgían figuras geométricas de complicado diseño que tenían un origen extraterrestre.
Director M. Night Shyamalan
El largometraje no hacía sino recoger la casuística y exponer una de las teorías más populares utilizadas para explicar el origen del fenómeno. Pero este título no fue el único en acercarlo al gran público: Mifune (1999) o Un lugar donde quedarse (2002) también lo abordaron.
Ronda: Un misterio nada redondo
El pasado mayo el periódico La Opinión de Málaga informó sobre la aparición de una desconcertante figura geométrica en un campo de trigo a las afueras de la localidad malagueña de Ronda. MÁS ALLÁ ha podido saber que, a diferencia de otros aparecidos en nuestra geografía en los últimos meses, es el único que no tiene que ver con campaña publicitaria alguna. El dibujo malagueño está compuesto por dos circunferencias. La primera presenta dos círculos concéntricos y la segunda está dividida en triángulos por una línea recta que termina en una semiesfera de 38,5 m de largo por 10,5 m de ancho. Su aparición motivó la intervención de la policía local de Ronda, que redactó un informe al respecto: “Personados en el lugar –explica el citado documento–se observan unas marcas, orientadas de Sur a Norte, consistentes en una especie de donut (...).
La parcela está sembrada de trigo y las señales se han producido por la falta del mismo al haber sido arrancado de raíz. No se observan rodadas ni otras señales producidas por vehículos”.
La investigación sigue abierta, ya que, según las conclusiones de la policía, se trata de un presunto delito de vandalismo y de allanamiento de una propiedad privada. Por el momento, ni el propietario del terreno ni ninguno de los arrendatarios de los cultivos colindantes ha sido testigo de nada anómalo. Todos ellos tuvieron conocimiento del suceso a través de los medios de comunicación. ¿Se trató de una simple gamberrada o de una maniobra para atraer turistas a la zona? El tiempo lo dirá.