• Blog Foro CC.OO. ChileComparte.cl: Exorcismos y posesiones

Nos abrimos paso entre espíritus malignos y seres oscuros para colarnos en los exorcismos que practica Hugo Álvarez, dirigente que los encabeza desde hace 31 años, nos revela los secretos del arte de expulsar demonios en una entrevista exclusiva.

Por Ollin Islas, con fotografías de José Luis Cuevas

ANTES DE EMPEZAR

No importa qué tan complicado sea el caso, así se trate de un espíritu inmundo o del mismísimo Satanás, para Hugo Álvarez, de 61 años, existe un arma invencible y todopoderosa capaz de aniquilar cualquier presencia demoniaca: la oración. El líder de la iglesia cristiana asegura que lleva más de tres décadas despojando a sus fieles seguidores de posesiones malignas sin pedir nada a cambio, solo disciplina religiosa y fe. Esto fue lo que nos reveló este controvertido personaje.

¿POR QUÉ MOTIVO SE

DA UNA POSESIÓN DEMONIACA?

Las posesiones demoniacas suceden principalmente cuando se lleva a cabo algún tipo de invocación en prácticas relacionadas con el ocultismo, ya sea satanismo, brujería y espiritismo, o bien, en juegos, como la Ouija. En la mayoría de los casos, las personas que son poseídas no se percatan de que están invocando espíritus malignos y, por supuesto, ni se imaginan las consecuencias.

¿CON QUÉ PROPÓSITO UN DEMONIO POSEE A UNA PERSONA?

El objetivo es atormentar a la persona poseída, provocar que no se acerque a Dios y, si está con Él, que se aleje del poseído. Por otro lado, las posesiones también pretenden provocar que la persona destruya a otros y a sí misma.

¿CUÁLES SON LAS CARACTERÍSTICAS DE UNA POSESIÓN?

Generalmente, el poseído presenta espuma en la boca, ojos en blanco, habla lenguas satánicas u otros idiomas al revés y tiene mucha fuerza. En algunos casos hay deformaciones físicas que pueden observarse en la cara, los pómulos o los labios. Otros muestran rasguños y golpes.

¿CUÁNTO DURA? ¿HAY LAPSOS EN LOS QUE LA PERSONA ESTÁ CONSCIENTE?

La posesión es un control total, absoluto. Hemos tenido casos en los que el demonio tiene a la persona hasta siete u ocho días y cuando tienen unos minutos en su conciencia aprovechamos para bañarlos y darles de comer. Durante una posesión el demonio controla la vista, el oído, el habla, los movimientos... todo.

¿EXISTEN TIPOS DE POSESIÓN?

Sí hay diferencias. Cuando se presenta una posesión satánica puede observarse desangramiento, por ejemplo. En el caso del espiritismo, práctica en la que se invocan espíritus de muertos, las personas entran a una dimensión que no nos pertenece y que no está permitida por Dios. Por ello, mientras hacen sus invocaciones pueden ser poseídas por

demonios de oscuridad que actúan como vampiros y succionan la vida de quien es poseído; así, la persona puede mostrarse cansada, triste, deprimida y es probable que comience a perder la salud.

¿CUÁLES SON LOS TIPOS DE DEMONIOS O SERES QUE PUEDEN POSEER A ALGUIEN?

En un primer nivel están los espíritus inmundos; después, los malignos; los demonios; y, por último, los principados o potestades (que poseen a gente que ejerce poder masivo, como líderes y políticos). En esta escala va en ascenso su maldad y su poder.

¿CÓMO DIFERENCIAR UNA POSESIÓN DE UNA SUGESTIÓN?

Lo definitivo es la oración. Cuando uno empieza la oración de exorcismo se puede dar cuenta si la persona está realmente poseída, ya que es muy difícil imitar todas las características de una posesión. Por otro lado, cuando estás en presencia de un demonio da una sensación extraña en el cuerpo, se sienten escalofríos y baja la temperatura. No obstante, sí hemos tenido casos en los que nos visitan personas que no están poseídas, solo tienen un problema psiquiátrico.

PARA EXPULSAR UN DEMONIO,

¿ES NECESARIO TRABAJAR DURANTE VARIAS SESIONES?

Depende del tipo de demonio, de la fe de la persona y del deseo de ella misma de salir de la situación. Nosotros les damos muchas indicaciones que deben seguir al pie de la letra, como orar, leer la Biblia y acercarse a Dios. De su disciplina depende cuánto tardemos en liberarlos.

¿CÓMO TE PREPARAS?

Después de 31 años ya estoy preparado y acostumbrado. Obtengo mi fortaleza, principalmente, de mi capacidad de orar. Yo suelo permanecer en oración, leer la Biblia todo el tiempo, realizar rezos en hebreo. Todo eso me da fortaleza espiritual.

¿QUÉ CASO TE HA IMPRESIONADO MÁS?

Primero hay que aclarar que las posesiones similares a las de la película El exorcista son pocas. Tal vez he visto unas 40 de esa magnitud en toda mi vida. El caso que más me ha impresionado es de Neftalí, un joven que entró a una secta satánica con engaños y permaneció ahí casi cinco años. Estuvo en clínicas porque expulsaba sangre por los ojos y oídos. En la clínica lo tenían amarrado de los tobillos y las manos mientras vomitaba sangre y los médicos jamás encontraron el motivo de sus malestares. Desde que comenzamos las expulsiones, Neftalí sufrió persecución, amenazas de muerte y secuestros por parte de la secta. Con él trabajamos durante cuatro años y medio, lo quisimos como a un hijo. Ahora da conferencias de prevención a jóvenes, pese a que adquirió el VIH por tantas transfusiones de sangre.

¿CUÁL ES LA POSTURA CATÓLICA RESPECTO A ESTOS EXORCISMOS?

Ellos hacen estudios e investigaciones muy largos para atender a alguien. Pienso que no es necesario hacer estudios: la oración te marca si alguien tiene o no tiene demonio. Según escuché, hace más o menos dos años el Papa dijo que ya había toda una preparación para sacerdotes exorcistas. Al parecer, en los últimos tiempos la Iglesia católica tiene planeado abrirse más frente a estos temas.

El Kit del Exorcista

(CLICK para agrandar)

DESPOJANDO DEMONIOS

Presenciamos y fotografiamos el exorcismo de una mujer que asegura estar poseída por un demonio y que pidió ayuda. Conoce su historia.

Con una mirada volátil y una actitud visiblemente ansiosa, Lorena, de 46 años, entró por la puerta de la Iglesia cristiana para solicitar la ayuda de los guías. Sin soltar una Biblia que yacía entre sus manos temblorosas, le explicó a los pastores HugoÁlvarezy Efraín Guerrero, así como a Esther Collins (miembro de esta iglesia que forma parte del Ministerio de Liberación), que desde hace algunos años practicaba el espiritismo y como consecuencia, ahora veía seres que no quería observar, tenía pesadillas y experimentaba cambios de carácter repentinos que le traían muchos problemas familiares.

Los tres guías comenzaron a orar y, casi de inmediato, Lorena sufrió una intensa transformación: de la mujer nerviosa que pedía auxilio emergió una gruesa voz (sin duda la suya) que exclamaba: "¡Es mía, nadie puede quitármela!", mientras daba patadas al aire, reía a carcajadas o emitía fuertes alaridos.

"¡Sal, en el nombre de Dios!", decían en distintos momentos los guías mientras oraban cada vez con mayor fuerza. La fortaleza de Lorena, al principio inquebrantable, fue cediendo poco a poco hasta que las voces violentas, los golpes y los alaridos concluyeron en el llanto desesperado de la devota. "¡ Desde hace tiempo siento que hay alguien dentro de mí que me hace pasarlo muy mal!", nos confiesa cuando logra tranquilizarse. "¡Hay alguien que no me quiere dejar, que me hace amanecer enojada y cansada y me provoca muchos problemas!"

Después de aceptar que realizáramos fotografías y publicáramos esta entrevista, Lorena nos reveló que es contadora de profesión, pero que desde que se siente poseída dejó su carrera, porque considera que no está en condiciones para desempeñarse en un trabajo. Aunque ya había asistido a esta iglesia 12 años atrás sin éxito, le prometió a los pastores y guías hacer un esfuerzo extra para asistir cada martes y jueves a sus sesiones de liberación con el propósito de encontrarla fortaleza espiritual necesaria para despojarse de lo que ha deteriorado su vida lentamente. "¡Esperamos que lo haga de verdad!", dice el pastor Hugo Álvarez. "¡Solo con sesiones continuas podrá salir adelante, pues el demonio entra en donde no se encuentra Dios!".

Al término de la sesión (que duró alrededor de 20 minutos), Lorena participó en una larga conversación sobre los valores cristianos promovidos por esta iglesia y partió, según sus palabras, en paz y más tranquila.